Durante años, los iPhone han sido los teléfonos inteligentes más rentables para la reventa, pero esa tendencia parece estar cambiando. Un reciente informe de SellCell, una empresa dedicada a la compra y venta de dispositivos usados, reveló que los nuevos modelos de iPhone están perdiendo su valor más rápido que sus predecesores. Esta situación ha generado preocupaciones entre los consumidores, quienes ven en el iPhone no solo un dispositivo de alta gama, sino también una inversión que, hasta hace poco, mantenía su valor mejor que otros teléfonos en el mercado.
La rápida depreciación del iPhone 16
El informe de SellCell destaca que el iPhone 16, en sus primeras dos semanas de venta, ha mostrado una pérdida de valor del 41,2%, superando el 33,2% de depreciación que experimentó el iPhone 15 en el mismo período. Esta tendencia acelerada en la depreciación del iPhone afecta no solo a los modelos básicos, sino también a las versiones más avanzadas.
Los datos reflejan un cambio que comenzó a notarse desde el lanzamiento del iPhone 12. A partir de este modelo, los iPhone han experimentado una reducción anual de su valor en comparación con generaciones anteriores. Esto supone una caída promedio de un 5% más rápido con cada nuevo lanzamiento. Si bien los dispositivos de Apple siguen manteniendo mejor su precio en comparación con otros competidores, esta pérdida de valor creciente podría impactar las decisiones de los consumidores a la hora de adquirir un nuevo teléfono inteligente.
La situación de Samsung: una mejora notable
Mientras los iPhone experimentan una depreciación acelerada, el informe señala que los dispositivos de Samsung están mostrando una tendencia opuesta. El Samsung Galaxy S23, por ejemplo, perdió el 61,1% de su valor en 12 meses, una mejora frente a la pérdida del 66,7% que sufrió el modelo anterior, el Galaxy S22, en el mismo tiempo. Además, el nuevo Galaxy S24 parece mantener mejor su valor, lo que refleja una estrategia más efectiva por parte de Samsung para evitar una rápida pérdida de precio en sus dispositivos.
¿Qué significa para los consumidores?
Los consumidores que solían elegir un iPhone no solo por sus prestaciones, sino también por su capacidad de mantener el valor en el mercado de segunda mano, ahora podrían replantearse su compra. La acelerada depreciación del iPhone, especialmente en sus primeras semanas de lanzamiento, está restando atractivo a estos dispositivos como inversión a largo plazo.
Por otro lado, la mejora en la retención de valor de los Samsung Galaxy podría atraer a más compradores, especialmente aquellos que valoran la rentabilidad de su dispositivo en el mercado de reventa. Si la tendencia actual continúa, es probable que en los próximos años los dispositivos de Apple y Samsung se encuentren a la par en términos de beneficios de compra.
El impacto en las ventas futuras
Si bien Apple sigue siendo uno de los líderes indiscutibles en el mercado de los smartphones, esta depreciación podría impactar en su cuota de mercado a medida que los consumidores busquen alternativas más rentables. Además, el informe de SellCell sugiere que la creciente competencia de otras marcas y la mejora en la retención de valor de dispositivos como los de Samsung, podrían inclinar la balanza a favor de otras opciones para quienes consideran la reventa como un factor clave en su decisión de compra.
Conclusión
Aunque los iPhone siguen siendo dispositivos de gran calidad y valor, el acelerado ritmo de depreciación en sus nuevos modelos es un aspecto que los consumidores no pueden ignorar. La tendencia indica que cada nuevo iPhone pierde su valor más rápido que su predecesor, lo que podría hacer que los usuarios reconsideren su inversión en estos dispositivos. Mientras tanto, Samsung mejora en su capacidad para mantener el valor de sus teléfonos, presentándose como una opción más competitiva en el mercado.