Un estudio reciente de la Universidad Texas A&M ha revelado que la productividad de los trabajadores de oficina tiende a disminuir significativamente por las tardes y, de manera más pronunciada, los viernes. Este hallazgo sugiere que los horarios de trabajo flexibles podrían ser una solución efectiva para aumentar la eficiencia y mejorar el bienestar de los empleados.
Disminución de la Productividad
El estudio, llevado a cabo por la Escuela de Salud Pública de Texas A&M, se centró en el comportamiento de 789 empleados de una gran empresa de energía en Texas, monitoreando su uso de computadoras durante un período de dos años, desde el 1 de enero de 2017 hasta el 31 de diciembre de 2018. Los investigadores utilizaron métricas objetivas como la velocidad de escritura, los errores tipográficos y la actividad del ratón para obtener datos precisos sobre los patrones de productividad.
Mark Benden, profesor y presidente del Departamento de Salud Ambiental y Ocupacional, señaló que a diferencia de otros estudios que dependen de autoinformes o evaluaciones de supervisores, este método ofrecía una mirada no invasiva y objetiva del rendimiento laboral. Los resultados mostraron un claro patrón: la actividad en las computadoras aumentaba de lunes a jueves, pero disminuía significativamente los viernes, especialmente por la tarde.
Factores que Contribuyen a la Caída de Productividad
Según el estudio, la caída de productividad no solo se limita al final de la semana, sino también a las horas posteriores al almuerzo cada día. Los empleados mostraban una reducción en la actividad de la computadora y un aumento en los errores tipográficos por las tardes. Este patrón refleja estudios previos que indican que el volumen de tareas completadas tiende a ser mayor al inicio de la semana y disminuye hacia el final.
Roh, profesor asistente de epidemiología y bioestadística, mencionó que los empleados realizaban más movimientos del ratón, clics y desplazamientos de lunes a jueves, con una notable disminución los viernes. Estos hallazgos subrayan la necesidad de reconsiderar la estructura tradicional de la semana laboral para mantener altos niveles de productividad y satisfacción laboral.
Beneficios del Trabajo Flexible
La investigación sugiere que implementar horarios de trabajo flexibles, como semanas laborales comprimidas o un modelo híbrido de trabajo remoto y presencial, podría ser beneficioso tanto para los empleados como para las empresas. En mayo de 2023, aproximadamente el 60% de los trabajadores de tiempo completo en Estados Unidos trabajaban exclusivamente en el sitio, mientras que el resto tenía horarios flexibles que combinaban el trabajo remoto y presencial.
Los estudios indican que los empleados con horarios flexibles experimentan menos estrés relacionado con los desplazamientos y la política en el lugar de trabajo, lo que resulta en una mayor satisfacción laboral. Además, estos horarios permiten a los trabajadores disponer de más tiempo para la familia, el ejercicio y actividades de ocio, mejorando así su salud física y mental.
Impacto Económico y Ambiental
Además de los beneficios personales, los horarios flexibles pueden tener un impacto positivo en la economía y el medio ambiente. Reducir el número de días de trabajo puede disminuir el consumo de energía en las oficinas, reducir la huella de carbono y las emisiones de dióxido de carbono, y optimizar el uso de recursos empresariales.
Mark Benden concluye que los resultados del estudio pueden ayudar a los líderes empresariales a identificar estrategias para maximizar la productividad y la sostenibilidad en el lugar de trabajo. Implementar horarios de trabajo flexibles no solo podría aumentar la eficiencia laboral, sino también mejorar el bienestar general de los empleados, creando un entorno de trabajo más saludable y productivo.
Estrategias de Recuperación y Bienestar
Para combatir la disminución de la productividad, los investigadores también sugieren incorporar actividades de relajación como los videojuegos. Estudios anteriores han demostrado que los videojuegos pueden ayudar a aliviar el estrés y reponer la energía después de un día de trabajo, preparándolos para un rendimiento óptimo al día siguiente.
En resumen, este estudio pone de manifiesto la necesidad de replantear los horarios laborales tradicionales y adoptar modelos más flexibles que no solo mejoren la productividad, sino que también favorezcan el bienestar de los empleados y el medio ambiente.