El 1 de noviembre de 2023, en Colombia se implementó un impuesto a los alimentos ultraprocesados y a las bebidas azucaradas. Esta medida tenía como objetivo desincentivar el consumo de estos productos, que han sido relacionados con problemas de salud como la obesidad y enfermedades crónicas.
El impuesto se aplica a los alimentos que contengan una cantidad de sodio mayor a un miligramo y menor o igual a 300 miligramos. Además, los productos con un contenido de grasas saturadas igual o superior al 10% también están sujetos a este impuesto. La tarifa inicial fue del 10% sobre el precio de venta final, y se espera un incremento gradual en los próximos años: un 15% para el próximo año y un 20% para 2025.
A partir del 1 de enero de 2024, los precios de los alimentos ultraprocesados volverán a subir, ya que el impuesto aumentará del 10% al 15%. Esto significa que los consumidores pagarán un 5% más por estos productos.
Esta reforma les pone un impuesto de 10 % en el 2023, de 15 % en el 2024 y de 20 % en el 2025 a los alimentos ultraprocesados industrialmente o con alto contenido de azúcares añadidos, sodio o grasas saturadas.
Este aumento tendrá un impacto directo en el bolsillo de los ciudadanos, ya que los alimentos ultraprocesados son productos de consumo básico para muchas familias colombianas. Según un estudio de la Universidad de los Andes, el 70% de los hogares colombianos consumen al menos un alimento ultraprocesado al día.
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| Más de 20 alimentos ultraprocesados estarán incluidos en los impuestos saludables. fuente: La Republica |
El aumento de los precios de los alimentos ultraprocesados puede tener un impacto positivo en la salud pública, ya que podría incentivar a los consumidores a optar por opciones más saludables. Sin embargo, también podría tener un impacto negativo en la economía de las familias de bajos ingresos, que son las que más dependen de estos productos.
A continuación, presentamos algunas recomendaciones para los consumidores que desean mantener una dieta saludable sin tener que gastar más dinero:
- Prepare sus propias comidas en casa. Esto le permitirá controlar los ingredientes y las porciones de sus alimentos.
- Elija alimentos frescos y nutritivos. Los alimentos frescos, como las frutas, las verduras y los cereales integrales, son más saludables y más económicos que los alimentos ultraprocesados.
- Lea las etiquetas de los alimentos. Esto le ayudará a identificar los alimentos que contienen altos niveles de azúcar, sodio y grasas saturadas.
El aumento de los precios de los alimentos ultraprocesados es una oportunidad para que los consumidores adopten hábitos alimenticios más saludables. Sin embargo, es importante que los ciudadanos estén preparados para este cambio y que busquen alternativas más económicas para alimentarse de manera saludable.